¡Te compartimos algunas ideas! Es posible agrupar los temas en tres grandes grupos: convivencia digital, prevención de riesgos y mirada crítica y reflexiva.
Además, muchas de estas situaciones no afectan de igual manera a varones que a mujeres y personas de otras identidades de género. Por eso, te invitamos a ponerte las lentes violetas para identificarlas.
Hay muchas formas de vincularse en las redes, pero todo vínculo, sea cara a cara o a través de las pantallas, parte de la misma base: el respeto y la empatía. ¿Qué pasa cuando no se respetan estos valores? En Internet existen situaciones entre pares que pueden ser tensas o violentas. Es importante hablar de estos temas para construir relaciones sanas y disfrutables ¡tanto dentro como fuera de los entornos digitales!
El ciberbullying describe la situación en la que un niño, niña o adolescente recibe agresiones por medios digitales por un período de tiempo, de parte de otro par o grupo de pares de edad similar. Lamentablemente es muy común, y es posible que alguna vez te haya sucedido o que conozcas a alguien que lo sufrió. En el ciberbullying los compañeros y compañeras pueden tener un rol muy importante en frenar la situación, mira cómo lo muestra el siguiente video:
¿Alguna vez te discriminaron en redes sociales por algún comentario o contenido que subiste? Por no estar cara a cara, y la posibilidad de esconderse a través de cuentas anónimas, los medios digitales pueden facilitar que algunas personas se expresen de manera agresiva, desde prejuicios propios, dejando de lado el respeto por los derechos de otras personas. La orientación sexual, la religión, la identidad de género, el país de nacimiento, los rasgos y el color de piel, son algunas razones (entre muchisimas otras) que pueden ser motivo de discriminación en las redes.
Recordemos que las diferencias nos enriquecen y no deberían ser motivo de agresiones o de discriminaciones. Antes de publicar contenidos o de comentar los contenidos del resto, siempre reflexionemos acerca de qué mensaje se transmite, es clave para frenar los discursos de odio que tanto circulan en las redes.
Las activistas feministas en redes sociales suelen recibir una enorme cantidad de mensajes de odio donde se las rebaja por su militancia por la igualdad entre los géneros. Las personas LGBTIQ también son un grupo que recibe muchísima censura y discriminación.
La inmediatez, la facilidad de publicación, la falta de empatía o a veces, la intención de causar daño, hacen que el compartir imágenes ajenas sin el consentimiento de la persona involucrada sea una práctica bastante habitual.
Muchas veces, esta acción es producto de la búsqueda de aprobación del grupo. Por eso es clave el consentimiento como pieza fundamental de la convivencia y el respeto.
La mayoría de las afectadas cuando se difunden imágenes íntimas suelen ser mujeres, a las que incluso se termina culpando por la situación. Por lo general, la responsabilidad nunca recae en aquel que utiliza imágenes íntimas y las viraliza por despecho, burla o venganza (quienes suelen ser varones).
Hay muchas formas de cuidarse en las redes. Existen distintos riesgos que se modifican a medida que cambian las tecnologías, pero puedes mantenerte informado para reconocer situaciones incómodas o peligrosas, cuidarte y ayudar a tus pares. ¿Cuáles son los temas a la hora de protegerse y tener una experiencia digital segura?
El grooming hace referencia a aquellas situaciones en las que una persona adulta contacta a un niño, niña o adolescente a través de medios digitales, con intención de abuso sexual. Es una de las peores situaciones que se pueden vivir online, por eso es tan importante que conozcamos que esto sucede. Te compartimos este video para que veas la importancia que pueden tener los amigos y amigas en reconocer una situación así:
Al igual que en muchas violencias, las víctimas de grooming son, en la mayoría de los casos, mujeres.
Las personas somos diversas, pero en muchos espacios de Internet no todas se ven representadas. Suelen mostrarse más personas que cumplen con los mandatos de belleza y estética (cuerpos flacos, piel blanca, jóvenes, heterosexuales, entre otros). Todo esto puede afectar cómo te sientes con tu propia imagen. Por eso, es necesario poner distancia de los ideales, y fortalecer la autoestima y valoración personal.
Los mandatos vinculados a la apariencia física afectan más a las mujeres.
"Haz estos ejercicios para un cuerpo perfecto", "maquíllate así", "prueba esta rutina en tus mañanas", "¡No comas esto!"... ¿Has visto la cantidad de publicaciones que circulan en Internet sobre comportamientos, dietas y rutinas para cambiar el aspecto, peso y demás características de nuestro cuerpo? Es necesario consumir esta información de manera crítica, para poder tomar nuestras propias decisiones y no hacer todo lo que nos indican en las redes.
Las dietas e imposiciones de delgadez sobre el cuerpo son algunos de los mandatos corporales más fuertes que se imponen especialmente sobre las mujeres.
¿Te gusta hacer challenges para subir a tus redes? Mientras muchos de estos videos son divertidos e inofensivos, también puedes encontrar algunos desafíos que son peligrosos tanto para la salud mental como para la emocional.
Mira este video: ¿Cuándo crees que un reto se vuelve peligroso?
Hay muchas formas de informarse y mostrarse en las redes. Por eso, es necesario poder reflexionar sobre los contenidos que vemos y pensar las consecuencias de lo que subimos.
No todo lo que leemos en Internet o nos comparten a través de las redes es cierto. Para una experiencia sana y segura en la web, tenemos que pensar de manera crítica antes de compartir información, utilizando recursos de chequeo de fuentes y de veracidad de los contenidos. Muchas veces, lo que se busca con las noticias falsas es desinformar, por eso es tan importante estar advertidos sobre esto y contar, realmente, con buena información.
Es muy fácil perder la noción de cuánto tiempo pasamos con los dispositivos y las redes, ¿no es así? Pero para poder gozar de una experiencia sana y segura, es importante poder equilibrar estas con otras actividades que involucren el cuerpo, el juego sin dispositivos, el contacto con la naturaleza, entre otras posibilidades.
"Todo lo que subimos permanece para siempre en Internet". Seguramente has escuchado esa frase, ¡y es verdad! Por eso, antes de subir cualquier contenido, es importante pensar cuáles pueden llegar a ser sus consecuencias presentes y a futuro. Las redes cuentan con múltiples herramientas de configuración de privacidad y recursos para evitar exponernos de más.